Estoy escuchando a Ivan Ferreiro. ¡Qué intimista! Me mola. Mientras, en el canal cibernético, mi lista de canciones vuelan hasta el keli de un colega de Madrid. Sueños en formato txt. Pronto chatearé con M, así me lo acaba de comunicar.
Acabo de sentir algo en mi cabeza, un pequeño brillo. Para mi eso sería la felicidad... el resplandor continuo,como ese libro de Stephen King que aún no leí ¡Eso es! Esta es la felicidad. Mis momentos felices los recuerdo así. Lucidez extrema, engaño supremo para mi mente humana y vulgar.
Ahora me siento un poco más fuerte, un poco más intenso. No es malo estar solo, siempre y cuando no dejes correr los acontecimientos. Como se suele decir "o te duermas en los laureles","ocupate y no te preocupes",...
Aquí está M...
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