cuando se elimina lo imposible, aquello que queda, por improbable que parezca, debe ser la verdad - doyle
martes, julio 31, 2007
Buenos tiempos para la lírica
Ayer vi una película, Disturbia, que sin ser Casablanca ni nada por el estilo, me hizo pasar un buen rato. La película es de suspense (un triler que diría el amigo Michael Jackson) y en ella, el protagonista, Shia LaBeouf, le imprime a la historia un cierto aire adolescente, aunque modernizado, de películas como Los Goonies, Karate Kid o similares. De hecho, en Transformers, donde también aparece y Spielberg es productor ejecutivo, ocurre un tanto de lo mismo. En ambas citadas películas, tiene un papel protagonista parecido, que podríamos denominar como friki-picarón, es decir, como los de nuestra quinta pero con éxito con las tías. Se trataría una versión 2.0 de lo que eramos. Aquí no queda la cosa, pues este chavaleiro será el hijo de Indiana Jones en la nueva entrega de la saga, en la que, al parecer, no se usarán efectos digitales. Les dejo con una reflexión: ¿Seremos nosotros los profetas y padres del neofrikismo? ¡Temblad colegialas góticas que voy con mi saber! ¡Balzag!
Publicado por
Espíritu
a las
14:28
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