Donde dije Jodorowsky digo Arrabal

Tras terminar Next de Michael Crichton, de lectura fácil sin llegar a impresionar, ahora me aproximo a los territorios espirituales de Siddhartha de Herman Hesse por recomendación y regalo navideño de Sr. P. También es uno de los libros favoritos del Sr. Bunbury, pamplinas profesional de corte patrio, como dirían en Estación Sonora. Se trata ésta, de una novela corta alegórica, escrita en un estilo simple pero poderoso y lírico, allá por 1922. No lo digo yo, lo dice Wikipedia. Amén.

Espero que cumpla sus funciones, que sea inspirador. Al menos tanto como el colega de Jodorowsky, Fernando Arrabal. Les dejo una entrevista completa en el programa de Jesús Quintero. No se pierdan esa cierta tendencia a pronunciar demasiado las errrres con pedantería y su excesiva teatralidad al hablar.

Primera parte

Segunda parte

Tercera parte

Cuarta parte

Tras ver los videos de este peculiar tipo y exquisito escritor, no se puede negar que hace lo que le sale del alma. Es tan sólo, un incomprendido más del escaso circo intelectualoide español, un genio loco. Se trata de una especie maldita en extinción, pues en este país, nos suele hacer gracia e incluso resultar interesante (¿por qué no?) lo cutre, lo decadente, lo casposo, lo ruinoso... pero no la pantomima inteligente y con mayúsculas. Hablamos de Arrabal, un tío que coge una papa graciosa en televisión y le importa una mierda e incluso se ríe de eso. Nosotros demonizamos al personaje y lo mandamos a paseo, sobre todo si se trata de alguien de altura. Deseamos derrocar el poder, bajarlo a nuestras ruinas más personales, convertirlo en nuestro opio, leña al fuego. ¿Por qué tanto complejo de inferioridad? No me extraña que no viva ya por nuestras tierras, es uno de los malditos y a ellos se les intenta eliminar. Necesitamos rebajar al grande para ser mejores. No olviden que la envidia es el deporte nacional. ¿Cómo va a ser bueno ese si es un enano y además es mi vecino? ¿Exagero? Pongo otro ejemplo: ¿Recuerdan a Umbral? En cualquier otro sitio sería un buen escritor, aquí un payaso (con perdón) que quería hablar de su libro. Lo estaban deseando y mordió el anzuelo. Fernán Gómez era sólo el viejo gruñón de a la mierda, ¿recuerdan? Es inevitable todos caen, necesitamos convertimos en algo más cercano y rancio donde se pueda vender mediocridad. Yo también morderé el anzuelo cuanto antes, lo tengo decidido.

Lo encontré...
Sólo resta empezar a jugar...

Pretencioso es poco