La imagen del mensaje de ayer me sigue llamando la atención cada vez que la veo. A veces tendemos a identificar sin darnos cuenta nuestras percepciones y nuestros pensamientos con el objeto percibido o pensado. Aquí se evidencia la diferencia. La percepción de la imagen se mueve, mientras que el objeto está quieto. ¿Nos pasa esto con otras cosas, por ejemplo, cuando pensamos en otras personas? Yo diría que sí.Mira que soy original, tanto rollo para al final volver a El mito de la caverna, a Matrix, ... En fin, ya saben.
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